El segundo día en El bosque de los sueños amanecimos con un sol radiante, así que unos cuantos decidieron que lo mejor era irse a la piscina para darse un chapuzón.
Mientras unos disfrutaban en el agua, otros dieron un paseo hasta el pueblo, que está en fiestas, y aprovecharon para hacer unas compritas en el mercado de artesanía.
La tarde sirvió para descansar y coger fuerzas, porque nos esperaba una gran noche en las fiesta de Cubillos de Sil. Nos pusimos guapos y guapas, y nos fuimos a cenar al pueblo y de verbena. ¡Qué bien lo pasamos, y cuánto bailamos!
Y bailando en la verbena terminamos el fin de semana, que ha sido muy intenso y muy divertido.
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