MAÑANA PIRATA, TARDE GOLOSA!
Buenas!
Ayer no nos dio tiempo a escribir así que lo hacemos de buena mañana.
El día de ayer para ser el primero estuvo muy bien. Cuando llegaron los autobuses empezamos con unos juegos para conocernos entre todos y conocer las partes del colegio donde vamos a estar durante las colonias.
Unos piratas malvados habían escondido un tesoro que tuvimos que buscar con la ayuda de un mapa, y gracias a la colaboración de todos logramos encontrar las monedas de oro, aunque alguno se sorprendió de que fueran comestibles. A parte de las monedas los piratas nos había dejado unos papeles para que hicieramos el sorteo del amigo invisible, pero...no podemos decir más!
Otro juego que nos gustó mucho fue el de "Quién tengo en el coco", que consistía en adivinar haciendo preguntas el nombre de la persona que tenías pegada en la frente, nos divertimos mucho, sobre todo al despegar las pagatinas!
Después de comer y del rato de siesta nos pusimos las botas haciendo figuritas de chocolate. Alguno que otro se metió más chocolate en la boca que en los moldes, pero mereció la pena porque a pesar de que nos pringamos nos lo pasamos muy bien.
Buenas!
Ayer no nos dio tiempo a escribir así que lo hacemos de buena mañana.
El día de ayer para ser el primero estuvo muy bien. Cuando llegaron los autobuses empezamos con unos juegos para conocernos entre todos y conocer las partes del colegio donde vamos a estar durante las colonias.
Unos piratas malvados habían escondido un tesoro que tuvimos que buscar con la ayuda de un mapa, y gracias a la colaboración de todos logramos encontrar las monedas de oro, aunque alguno se sorprendió de que fueran comestibles. A parte de las monedas los piratas nos había dejado unos papeles para que hicieramos el sorteo del amigo invisible, pero...no podemos decir más!
Otro juego que nos gustó mucho fue el de "Quién tengo en el coco", que consistía en adivinar haciendo preguntas el nombre de la persona que tenías pegada en la frente, nos divertimos mucho, sobre todo al despegar las pagatinas!
Después de comer y del rato de siesta nos pusimos las botas haciendo figuritas de chocolate. Alguno que otro se metió más chocolate en la boca que en los moldes, pero mereció la pena porque a pesar de que nos pringamos nos lo pasamos muy bien.
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